Álvaro Alonso

Buscaba una empresa que me pudiera organizar un viaje a medida. Viajaba solo y no disponía de mucho tiempo por lo que quería evitar cualquier tiempo muerto. Ambulo me organizó un viaje inolvidable combinando Argentina y Chile. Recordaré siempre el trekking por el parque Torres del Paine y la experiencia de remar en kayak entre los icebergs de un glaciar. Comprendieron tan bien lo que me gustaría que fueron capaces de proponerme un viaje increíble además de cuidar los detalles, incluso estando yo allí adelantándose a un imprevisto que iba a sufrir en mi siguiente parada, arreglándolo.

María Eugenia Pérez y José de Alarcón

Para organizar nuestro viaje a California y a la Polinesia Francesa contactamos con numerosas agencias que nos ofrecían paquetes idénticos. Ámbulo se adaptó perfectamente a nuestras necesidades y tuvo con nosotros un trato realmente personalizado. El resultado fue un viaje inolvidable, en el que no desaprovechamos un solo minuto porque la organización era excelente (nada de vuelos a horarios intempestivos ni estancias en lugares intrascendentes para enganchar destinos tan distantes como California y Polinesia). Todos los consejos sobre actividades a realizar, excursiones, y demás decisiones a tomar para planificar el viaje fueron muy acertados. Destacamos también algunos detalles que muestran el espíritu de servicio y búsqueda de satisfacción al cliente, como por ejemplo las vistas del bungalow que Ámbulo nos reservó en Bora-Bora (era claramente de los mejores), la simpatía y profesionalidad del partner local de Ámbulo que nos ayudó en la recepción y los traslados de Tahití y Morea o el hecho de recomendarnos reservar nosotros mismos un hotel en Las Vegas por Internet para beneficiarnos de un descuento. Recomendamos a cualquier persona que esté pensando en hacer un viaje diferente a la oferta de las agencias tradicionales y que valoren servicio, “mimo” en la planificación y profesionalidad que no duden en ponerse en las mejores manos: las de Ámbulo.

Silvia Freixedes y Marc Martín

Buscamos algún lugar donde ir de viaje de novios y la verdad es que no nos deciamos entre nosotros. Decidimos contactar con Alex desde Barcelona y después de darle muchas vueltas al asunto nos decidimos por un combinado de cultura y naturaleza. Guatemala y Costa Rica fueron nuestro destino.

No queríamos el típico viaje organizado, sino poder escoger los lugares que nosotros queríamos ver y dedicarles el tiempo necesario, sobre todo la sensación de poder estar descubriendo algo por tu mismo y disfrutar de una aventura y Alex consiguió lograr nuestras expectativas mucho más de lo que nos imaginamos.

Diseñamos entre los tres lo que seria nuestro recorrido y el se ocupo de ponerlo bonito, con hoteles, sugerencias de lo que podríamos visitar y aprovechar bien el tiempo... en definitiva que nos ha realizado un viaje impresionante, de los que recomiendas a amigos y conocidos y todo gracias a su organización, atención, buen hacer y sobre todo, mucha paciencia con todos los cambios que le hemos hecho. Muchas gracias Alex por todo y seguro que nos veremos de nuevo. PURA VIDA!

Ramón Villalon y Celia Mateo

Contactamos con Ámbulo por recomendación de unos amigos, y la verdad es que todo salió genial. Después de marear a Alex con multitud de destinos nos decidimos por Nueva York y Polinesia francesa por los contrastes que nos iba a deparar. Alex nos consiguió una combinación de vuelos perfecta, incluidos los internos entre Papeete, Moorea y Bora Bora, y unos hoteles estupendos. Una vez allí hicimos lo que Alex nos recomendó y acertó plenamente. Y si queríamos hacer algo por nuestra cuenta, siempre estaba al otro lado del teléfono. Inolvidables han sido muchas cosas: paseo en limusina por Broadway, visitar el pueblo Tiki en Moorea, dar de comer a rayas, submarinismo por la barrera de coral, la experiencia de alojarte en un bungalow sobre el agua, en fin...

Muchas gracias por tu paciencia, seriedad y simpatía, Alex, y hasta la próxima!

Arantxa Sánchez y Pere Olive

Decidimos hacer una ruta por el Oeste de los EEUU por nuestra cuenta y nos dirijimos a Ambulo para que nos orientara un poco y además nos tuviéramos un apoyo en los destinos. Ha salido todo perfecto, los delegados de Ambulo en las ciudades que hemos visitado han estado estupe ndos y muy profesionales. La verdad es que ha sido el viaje de nuestra vida y continuaremos viajando con Ambulo a partir de ahora por la seguridad y garantía que nos ha dado. Recomendamos a la gente que visite la costa Oeste de EEUU en concreto San Francisco, Las Vegas y Los Angeles y que si lo hace en coche que no es nada aburrido aun siendo bastantes Kilómetros no dejen de visitar el parque de Yosemite y lo Lagos de Mammoth Lake y gozar de unos paisajes maravillosos.

María José Luna y Alberto Campillo

Nuestro viaje de novios era algo con lo que habíamos soñado toda la vida: Australia era un lugar que queríamos visitar desde siempre. En la difícil tarea de organizar el viaje, conocimos Ambulo gracias a la recomendación de mi primo, y fue todo un acierto: Alex en todo momento tuvo magníficas ideas. Al comentarle que no nos atraía demasiado el sureste asiático, nos sugirió hacer un paréntesis en el interminable vuelo al continente austral en la costa oeste americana, donde tuvimos la ocasión de conocer San Francisco, y alojarnos en un hotel modernísimo e increíble. También teníamos la idea de finalizar el viaje con unos días de relax en la playa, pero al enterarnos de que nuestras fechas coincidían con la estación de lluvias en las islas de la Gran Barrera de Coral australiana, nos desanimamos un poco. Inmediatamente, Alex sugirió otro destino paradisíaco: la isla de Bora Bora, en donde nos alojamos en un hotel de ensueño. Sin duda, planificar nuestro viaje con Alex fue una muy buena experiencia, de la que destacaría dos cosas: sus consejos de experto a la hora de recomendar destinos, hoteles y restaurantes, y la enorme flexibilidad demostrada, modificando nuestro itinerario para adaptarse siempre a nuestras necesidades y recibiéndonos amablemente a deshoras para compatibilizar la organización del viaje con nuestras apretadas agendas profesionales.